Fíjate en la punta de mis zapatos.
¡A PATEARTE VOY!
¡Patearé como mula tu trompa llena de pedantismo.
Patearé con verborragia tu discurso de despotismo.
Patearé tu decrépito reuma con salvajismo.
Y como una hembra ultrajada por tu inhumanismo.
Patearé tu pellejo hediondo de egoísmo!